El proceso de toma de decisiones por consenso busca el acuerdo de la mayoría de los participantes y al mismo tiempo intenta resolver y reducir las objeciones que presenta la minoría para lograr la decisión más conveniente para todos.

Cuarenta delegados y observadores se reunieron durante una semana en un albergue juvenil con vista al lago de Constanza, en Suiza, con motivo de la Asamblea General (GA) de las Brigadas Internacionales de la Paz (PBI). La misión era llegar a un consenso sobre varias propuestas relacionadas con la dirección que tomará PBI en el futuro. Cada tres años, los Grupos de país, los Equipos de proyecto y los Comités debaten propuestas y envían delegados que llevan las preocupaciones de los miembros a la Asamblea General.

PBI es una organización poco común ya que las decisiones políticas se logran a través del consenso de todos los miembros. ¿Por qué lo hacemos así? ¿Cómo lo logramos?

Los miembros participan en las decisiones

Hay muchas maneras de decidir. En ciertas circunstancias, que una persona decida por todo un grupo acelera el proceso de organización, lo cual es útil cuando la velocidad impera. En PBI generalmente tenemos tiempo para discutir antes de tomar una decisión. Al elegir un método para la toma de decisiones es importante preguntarse: “¿Es un procedimiento justo?â€? y “¿Se logran buenas decisiones?â€?.

Nosotros creemos en involucrar en el proceso de decisión a toda persona que se vea afectada por esa decisión. Entonces, la decisión refleja la voluntad de todo el grupo, no solo la de los líderes. La gente que lleva adelante el trabajo es dueña de la decisión: es de ellos. Cuando se intenta llegar a un consenso surgen muchas inquietudes que son resueltas por todo el grupo y que modifican la propuesta. Esto hace que la decisión sea más lenta, pero con una respuesta y un aporte mucho más completo del grupo.

Se dice que el consenso lleva demasiado tiempo y que es difícil de implementar. Las decisiones complejas llevan tiempo, cualquiera sea el método que se emplee. Y a veces, implementar una postura de compromiso que no satisface a nadie es la opción más ineficiente.

Fomentar el conflicto

El consenso es un proceso a través del cual se resuelven conflictos de manera pacífica. El consenso funciona mejor cuando se fomenta y se apoya el conflicto. El conflicto es algo deseable, no se debe negar o descartar. El conflicto puede parecer negativo cuando los grupos que apoyan diferentes propuestas sólo miran los puntos negativos de la propuesta del otro grupo, o del grupo en sí. En un ambiente adverso uno es dueño de su idea y la defiende, muchas veces frente a mejoras presentadas por otros.

El consenso considera cada propuesta en particular. Se trabaja en equipo para conseguir la mejor decisión del grupo. Todas las preocupaciones se escuchan y deliberan, hasta haber escuchado a todos. Como las propuestas no son propiedad del que las presenta, se puede llegar a una solución con la cooperación de todos.

Llegar a un consenso respecto de una propuesta no significa que todos están de acuerdo. Sólo significa que todas las preocupaciones importantes que se presentaron fueron tratadas, y que las preocupaciones que no fueron resueltas no son tan esenciales, entonces todos sienten que los objetivos del grupo se favorecen con la propuesta.

¿Cómo se lleva adelante?

El proceso por el cual se alcanza el consenso es interesante y bastante complejo. Brevemente, se presenta una propuesta, generalmente vista por todos los participantes con mucha anterioridad, y se hacen y responden preguntas que apuntan a aclarar la propuesta.

Después hay una discusión general. Si hay un acuerdo general el facilitador puede pedir el consenso a través de la siguiente pregunta: “¿Queda alguna preocupación acerca de esto?â€?. Luego de un lapso de silencio el facilitador declara que se ha logrado el consenso.

Lo que sucede generalmente es que hay varias preocupaciones para tratar. Con un grupo tan grande como el de la Asamblea General, es mejor hacerlo en grupos más pequeños para tener tiempo para discutir y tal vez volver a formular la propuesta. Los pequeños grupos designan a un representante que se reúne con los representantes de los otros grupos para formular una propuesta que intente resolver todas las preocupaciones de importancia que se plantearon. Luego, se vuelven a discutir las propuestas modificadas en los grupos pequeños. Este ciclo se repite varias veces cuando se presentan propuestas controversiales.

Agradecemos a CT Butler por el material de "On Conflict and Consensus". Para más información sobre el proceso de consenso, su libro está disponible enwww.consensus.net

Translated by Nicole O' Dwyer